Tragedia aérea en Araira. Abril 1947.

Caracas 09 de Abril.-

Por: OSCAR E. MUÑOZ LIMA.

El 8 de Abril de 2020, se cumplieron 73 años de una de las primeras tragedias aéreas ocurridas en Venezuela, pero con la particularidad que este hecho aconteció en la Población de Araira, específicamente en el Cerro Las Pavas, de la actual Parroquia Bolívar del Municipio Zamora, del estado Bolivariano de Miranda.

Fue un día Martes 8 de Abril del año 1947, una aeronave  perteneciente a la Empresa Aeropostal, Matricula YV. C-ALO, Modelo Douglas-C47, con 27 personas a bordo, integrada por un grupo de Estudiantes, Profesores y Tripulación, parten de Cumana, Estado Sucre, con destino a La Carlota.

Foto referencial del avion Modelo Douglas-C47

Esta ruta de vuelo, atraviesa, inicialmente por lo que se llama la línea de la Costa, pasando por el Cerro Las Pavas-Majagual, ubicados al noreste de la población de Araira. Para esa ocasión la zona se encontraba con un mal tiempo producto de  una tormenta, siendo esta la causa, según la investigación posterior, la que origina el fatal accidente, provocando  poca visibilidad para el momento,. Aproximadamente las 9 de la mañana la Aeronave impacta  con el Cerro Las Pavas, en un punto llamado Alto de Las Cruces. El plano izquierdo (Ala)  choca contra unos árboles, originando un incendio que se propaga inmediatamente, hacia el fuselaje y otros puntos del avión, provocando a su vez,  un estruendoso  ruido, el cual alerta, de acuerdo a lo escrito por la amiga Flor Berroteran Daló, al señor  Guido Possamai, quien comerciaba con cochinos y estaba comprando animales ese día en el sector; oyó el ruido del avión y lo vio caer,  inmediatamente le pidió a Ángel Sandoval, hijo de Manuel Sandoval, para que fuera a Araira e informara a las autoridades lo sucedido. Sandoval llegó a la población aproximadamente, a las 11:00 a.m. y fue detenido por el jefe civil de Araira, Juan Graterol y también por el de Guatire José Ángel Matamoros para las averiguaciones.

El señor Fernando Berroteran Rodríguez, en  el  trabajo de investigación escrito  por su hija Flor, narra, que  él junto con Roque Possamai, Hilario Delgado y otros compañeros, al enterarse de la noticia salieron hacia Las Pavas a la una de la tarde de ese día, Rio arriba, por las montañas.  En la vía encontraron a Benjamín Hidalgo, baquiano de la zona, quien se ofreció a acompañarlos porque podían perderse ya que no conocían la zona. A las 06:30 p.m. llegaron al lugar del accidente. El escenario descrito fue que el  avión se quemó y algunos cuerpos quedaron calcinados.

Producto del cansancio  acamparon a  varios metros del avión; allí pasaron la noche en el suelo, el señor Simón Melchor, habitante de la comunidad, le prestó una cobija pero a pesar de esto, pasaron mucho frio, además de mojarse, porque había demasiada neblina en el lugar que mojaba. Tuvieron que alimentarse con piña verde y apio crudo encontrados en los alrededores.

Al amanecer – narra el Señor Fernando Berroteran, – ya habían llegado las autoridades de la región, los cuales no permitían acercarse a la aeronave, sólo pudo apreciar como el avión arrasó con los copos de árboles del cerro, dejando una especie de tobogán. Él vio el cuerpo inerte de uno de tripulantes  recostado de la aeronave en la parte de afuera, también los cuerpos de dos mujeres, según él supo después, eran de Mireya Venegas y Mireya Rincón.

Escribe  el Profesor Jesús María Sánchez, en una publicación del Mensuario Tere-Tere  (Mayo 2006) “que hasta la pequeña población de Araira, para esa época rodeada de una exuberante vegetación y bañada por las aguas cristalinas del rio que cruza su angosta geografía, se hicieron presente Luis Beltrán Prieto Figueroa (Ministro de Educación), Antonio Martín Araujo (Ministro de Comunicaciones) y los diputados de la Asamblea Nacional Constituyente Manuel Martínez Manuel, Mercedes Fermín y Luis Troconis Guerrero. Al lugar del siniestro, a lomo de mulas, llegó para el levantamiento de los cadáveres calcinados, una comisión  formada por el médico Gilberto Useche Mendoza, los Jefes Civiles de Guatire y Araira y el Juez Benito Barrios. Las familias de Araira miraban con asombro la gigantesca movilización de personas que se desplazaban por las tranquilas calles del pueblo, en la búsqueda de información acerca del avión que se había estrellado en Las Pavas”.

El señor Fernando recuerda que vino la Policía de Caracas a Araira, dirigió el tráfico en el pueblo. La cantidad de carros que vinieron congestionaban las calles de tierra de la población. Como el sitio donde cayó el avión era una región boscosa, los vehículos sólo pudieron llegar hasta el lugar denominado El Trompillo, pues no existían vías de comunicación  cercanas al lugar del accidente, por lo tanto, desde ahí debían continuar caminando, en lomos de burros o caballos.

Hace  referencia  Flor Berroteran en su trabajo escrito,  que para el momento en el Pueblo de Araira escaseó el coleto, tela, lona, alimentos, víveres… los visitantes arrasaron con todo y los comerciantes no estaban preparados para surtir a tal magnitud de personas que vinieron a saber sobre el accidente.  Algo que Fernando recuerda muy bien fue cuando comenzaron los preparativos para el transporte de los cadáveres, él y sus compañeros no se quedaron para ayudar sino que regresaron a Araira, alega que ellos no sabían cargar muertos en hamaca (esta era la forma de transportar los cuerpos desde los campos para la época). Los fallecidos fueron trasladados hasta El Trompillo a pie y de ahí en ambulancias hacia Caracas.

Cuando ellos venían de regreso, encontraron en el camino a varias personas acaballo, entre ellos al doctor Gilberto Useche y a Gonzalo Veloz Macera, dueño de Radio Cultura (el mismo de Televisa hoy Venevisión) todo vestido de blanco. Alguien les sugirió no decir que todos estaban muertos.

Existe la presunción que algunos ocupantes quedaron vivos, dado la posición de los cuerpos en los cuales fueron ubicados, pues unos estaban fuera del avión,  pero dado la magnitud y efectos de sus heridas, fallecieron a las pocas horas.

Esta aeronave, Matricula YV. C-ALO, era un avión de carga de carne, por cual llevaba unos ganchos especiales para el transporte de carne. En la investigación realizada se determinó que había sido facilitada para el traslado de los estudiantes y profesores, quienes retornaban a Caracas, luego de  un Evento docente (reunión de Profesores de Liceos Región Oriente)  y la Delegación Estudiantil  había participado en un Encuentro Regional  Deportivo.

La Tripulación estuvo compuesta por  el Capitán (A.C.) Enrique Santa Cruz, El Copiloto, Capitán (A.C.) Rodolfo Hernández y el Radio Operador, José Manuel Ramírez García.

La Junta de Gobierno, presidida por Rómulo Betancourt,  decreto tres días de duelo a nivel Nacional, para honrar a quienes perecieron en este trágico accidente, reconocido como un  evento que marco la historia en los anales de la Aviación Civil de Venezuela.

DATOS DE INTERES:

El Cerro las Pavas, Majagual  y Cogollal, forman  parte de un conjunto de montañas, ubicadas en la llamada Fila Maestra (Divisoria de la Vertiente sur y norte) del ramal Litoral, Cordillera de la Costa; localizadas al Noreste de la población de Araira, (Parroquia Bolívar, Municipio Zamora del Estado Miranda), con una altitud de aproximadamente, 1920 metros .

La zona se encuentra dentro de  la aerovía designada  actualmente por el ATC, como la W 30, (léase Wisky 30) siendo utilizada para el tráfico aéreo. Esta es una de las razones por las cuales a mediados del mes de enero del presente año, se realizó una búsqueda  terrestre  y aérea por la desaparición de una  aeronave  matricula YV. 2604, (aun sin ser localizada) En ruta Higuerote-Aeropuerto Caracas (Charallave), donde comisiones conjuntas de Protección Civil del  Municipio  Zamora y del CEMAG, acompañados de baquianos, encuentran  restos de la Aeronave YV. C-ALO , lo cual origino una ligera confusión al momento de la identificación de origen de esta pieza localizada (ver foto) . 

En la próxima entrega hablaremos de los pasajeros (Estudiantes y Profesores) que lamentablemente perecieron en este siniestro aéreo, como el caso de la Profesora Mireya Venegas Wesoloski, quien es considerada  pionera de la enseñanza de la  Física y Matemáticas en  Venezuela…

AGRADECIMIENTO:

A Flor del Carmen Berroteran Daló, -Araireña de pura cepa- autora de buena parte de esta reseña, a su padre el señor Fernando Berroteran Rodríguez, testigo presencial de este infausto accidente,  quien con sus 97 años de edad, aún mantiene la lucidez y memoria de esos  momentos, facilitando  algunos que otros detalles.

Al amigo Enrique Martin Cuervo, de la Organización Rescate Humboldt, acucioso investigador  de los Accidentes Aéreos  en Venezuela y autor de varios libros relacionados al tema.

Al Compañero del CEMAG, Profesor David Acosta, Excursionista y Maratonista, por algunas fotos que acompañan esta reseña

Al Compañero CEMATICO Tomas López, por el aporte fotográfico.

A la amiga Mirelsis  Rodríguez, Oficial SAR, del Servicio de  Búsqueda y Salvamento –INAC-

A Aníbal Palacios, Cronista Aldeano  y Columnista del Mensuario Tere-Tere.

Y en general a los compañeros del CEMAG.

TÉRMINOS UTILIZADOS

YV.    Léase: Yankee Víctor. Prefijo que se refiere a la nomenclatura internacional para designar  el          País de origen de  una  Aeronave  y radio  comunicación.    En este caso las letras YV  se  establecen   exclusivamente para Venezuela.

(A.C.)    Aviación Civil              

AEROVÍA:    Se define  en aviación, como una ruta designada en el espacio aéreo, para la circulación de las aeronaves bajo control del ATC.

 ATC: Control de Tráfico Aéreo, (Sede principal Maiquetía, Edificio ATC) .

SAR   Siglas internacionales  de Búsqueda y Salvamento

INAC  Instituto Nacional de Aeronáutica  Civil

ALTITUD Distancia vertical entre un nivel, punto u objeto, con relación al nivel del Mar.

FUSELAJE   Se refiere a la parte de una aeronave, donde se ubica la Cabina y área de Pasajeros  y Carga.

OSCAR E. MUÑOZ LIMA.

Prensa / CEMAG